Rigoberto Meñan, es un boxeador de los pesos medios, que actualmente compite en los Súper Walters, por falta de competencia en su categoría, y sigue creyendo en él, en su potencial y en su estilo para ser el mejor del país.
Rigoberto nace el 26 de agosto de 1996 en el mercado de Monte Bata, luego fue trasladado al hospital, comentaba en sus respuestas, afirmando de ese modo que tenía 8 hermanos, sí 8, ya que “el primogénito falleció hace unos años” según reconoce el pugilista.
Sus padres se separaron cuando apenas tenía tan solo un año de vida, y asegura que, su infancia no fue bonita, pero eso no quiere decir que fuera la peor del mundo. “Un niño de un matrimonio divorciado que iba de mano en mano, no puede decir que creció con una sola persona. A veces iba con mi padre, otros con mi madre, luego acabé con mi tío en Gabón”.
A pesar de tener una infancia un poco oscura, eso no le impidió estudiar. Rigoberto cursó sus estudios primarios en el centro Emmanuel de zona, los secundarios en Madre Catalina de Miyoman y el bachillerato en Sialo, Ngolo, todo esto en la ciudad de Bata, y según afirma, sigue estudiando.
Su interés por el boxeo nació cuando tenía entre los 16 o 17 años viendo el boxeo inglés, aunque le inspiraron boxeadores de talla mundial como Joe Luis, Micke Tyson o Leonardo Suga Rey.
Su debut en competiciones internacionales, no fue como le hubiese gustado, sí que fue con el Full Contact, y a pesar de sus esfuerzos de estar en la élite del boxeo ecuatoguineano, todavía no tiene un contrato con algún patrocinador o club, lo que quiere decir que es agente libre.
Desde que está en este deporte, el apoyo que ha recibido es el de sus amigos, no tanto el de su familia, confiesa Rigoberto.
En cuanto a su vida más personal, Rigoberto Mañana cuenta que tiene pareja con un hijo, aunque no ha desvelado el sexo. También asegura ser un buen chef, aunque le da a los fogones cada vez que tiene la oportunidad, y prefiere dedicar su vida lejos del deporte con la moda, la cocina, los perros y su día a día “es el de cualquier otro joven guineano que se busca la vida desempleado”.
Ya regresando a su deporte, el peso Walter asegura que, su momento favorito en el boxeo es cuando el árbitro levanta su mano por haber ganado una pelea, y como la mayoría de nuestros deportistas, está en contra del sexo antes de un combate.
Para Rigo, el boxeo nacional está siendo infravalorado, por eso cree que, se debería innovar en todos los aspectos.
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