Federaciones Nacionales: Ruido por los sillones en las Asambleas Electivas y Silencio absoluto en las canchas deportivas

Hacen aproximadamente tres meses atrás, varias federaciones celebraron sus Asambleas Electivas que indicaban el cierre del año Olímpico 2017-2021, donde se pudo constatar el cambio de dirigentes deportivos en algunas federaciones, mientras que en otras, se sigue percatando la continuidad de los mismos individuos al frente de esas entidades deportivas.

Lo sorprendente aquí es que, después del tira y afloja en las urnas, el deporte en la mayoría de las federaciones sigue estando secuestrado, lo que pone en evidencia que el ruido es más que la actividad deportiva, ya que los dirigentes de esas entidades, demuestran que su interés solo se basa en ocupar el sillón y esperar a que transcurran sus 4 años de mandato.

 Me acuerdo del  pasado 25 de junio, vi lucir varias federaciones deportiva en el «Estadio de Malabo, donde pude hacer un recuento de más de 17 federaciones y unos supuestos deportistas colapsados sobre el césped, desfilando por el natalicio de su excelencia el vicepresidente de la república. En ese instante, me dio la impresión de que a partir de ese momento el deporte tomaría un rumbo diferente al acostumbrado, pero para mí sorpresa todo sigue igual o peor hasta la fecha. Tras una minuciosa investigación, pude descubrir que varios de esos jóvenes (supuestos deportistas), no están afiliados a ninguna federación, sin embargo, son llamados por dirigentes deportivos con el único fin de portar las pancartas, carteles y Camisetas de unas determinadas federaciones y desfilar, para después de la actividad, visitar algún bar cercano donde el alcohol y el cigarrillo suele ser la tónica dominante, pero en sus acostumbrados discursos después de ser elegidos como presidentes de federación, dicen hacer deporte para «luchar contra el alcohol, la drogadicción y desarrollar el sector deportivo».

¿SE DEBERIAN SEGUIR AUTORIZANDO FEDERACIONES DEPORTIVAS?

Se puede constatar la autorización constante de nuevas federaciones deportivas, pero anualmente se pueden contar sólo con los dedos de la mano las que están en rodaje, mientras que la gran mayoría brilla por la falta de actividades, y justifican ese hecho en varias ocasiones por la falta de subvención económica «ya no nos llega la subvención del Gobierno», por lo que se puede entender que varias federaciones fueron creadas por los fondos que invierte el Gobierno para potenciar el deporte Nacional. «No hay fondos», una expresión monótona que a mí juicio considero que nunca han querido desempeñar la actividad deportiva. Las federaciones son empresas y cada empresario debe velar por la continuidad del servicio que ofrece, a eso, me refiero a la capacidad de gestionar sus propios fondos, independientemente de lo que puede ofrecer voluntariamente el Gobierno.

Es cierto que no se puede desarrollar el deporte sin dinero, pero tampoco se debe desarrollar por dinero, porque correría peligro de perder su esencia real y pagarlo los jóvenes.

«EL DEPORTE ES SALUD»

En su día la Organización Mundial de la Salud (OMS), en una publicación ya advirtieron sobre la causa de la falta del deporte en las personas, asegurando que, «al año fallecen unas 5 millones de personas mundialmente por la falta de hacer deporte», no me quiero imaginar que los supuestos propulsores del deporte, ignoren un dato tan importante por el hecho de tener la mente centrada en los fondos que subvenciona el Gobierno, y no ser capaces de descubrir el talento que tienen muchos jóvenes en el deporte y reforzarlo. Hoy en día me emociono bastante al ver hombres nativos como Juan Michá y otro al frente de nuestro equipo de fútbol, estoy convencido de que si Michá lo hace tan bien, otros guineanos también son capaces de poner su talento al descubierto y despertar la emoción de toda una nación, ondeando la bandera del país en todos los continentes.

Culmino esa humilde intervención, dando gracias a las menos de 10 federaciones que luchan por el deporte Nacional, intentando cumplir el sueño de sus deportistas, independientemente de que haya financiación del Gobierno.