Hace dos días el golfista estadounidense Tiger Woods sufrió un accidente automovilístico en las afueras de Los Ángeles, donde resulto gravemente herido, y según las autoridades del condado el hecho no conllevara algún cargo contra el golfista, tras dar negativo en alcohol y drogas.
Tras el incidente el deportista de 45 años fue trasladado al quirófano para ser intervenido en una larga cirugía en la parte inferior de su pierna derecha y su tobillo en el Centro Médico Harbor-UCLA. El hueso del golfista se rompió en más de dos partes. También fueron fracturas, por lo que el hueso roto quedo expuesto al aire libre, creando riesgos de infección, explicó el director médico Dr. Anish Mahajan.
A Woods se le ha insertado una varilla en su tibia para estabilizar los huesos tanto de la tibia como el peroné. Además, estabilizaron los huesos del pie y el tobillo con una combinación de tornillos y clavijas. Al mismo tiempo aliviaron la presión en el muslo y el tejido de su pierna al soltar quirúrgicamente la cubierta del musculo, añadió Dr. Anish Mahajan. Actualmente se encuentra recuperándose en el hospital.
Este es el tercer accidente de este tipo que sufre el golfista, tras los de 2009 y 2017, en estos casos bajo influencias de sustancias. Por ahora habrá que esperar para saber cuándo podría regresar a los campos para volver a luchar entre los grandes, ya que este revés presenta un contragolpe para los planes que tenia este año de volver a la gloria del golf. Las autoridades indican que están investigado si pudo haber alguna distracción porque ya se ha desestimado las drogas y el alcohol.
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